martes, 12 de mayo de 2015

Golems y su origen




Ya hace tiempo que empecé a reflexionar sobre las criaturas artificiales, cuando los hijos de metal y la flama comenzaron con sus innovaciones, los grandes golems que ahora conocemos como sintéticos eran los únicos que rondaban por la tierra, esos grandes gigantes metálicos solucionaron la escases de empleados para construcciones y de los grandes guardias para mejorar la seguridad de las ciudades, al ser manejados por un piloto especializado era muy raro que causasen problemas, ya que los ingenieros que los construían eran muy hábiles para detenerlos, hasta que uno de los grandes magos caóticos dio un pazo mayor al lograr conjuntar sus artes arcanas con los avances de la tecnología, en verdad, había que reconocer que el gran genio de Drevni Uznemir era de admirar, era muy respetado dentro de varias sociedades de la facción de las sombras, pero como era de esperarse, su ambición empezó a crecer al ver el gran potencial de los seres creados para ayudar a la sociedad, y comenzó a experimentar con algunos que varios ingenieros decidieron proporcionarle, así pues, trato de introducir de alguna manera suficiente magia como para que el metal fuera imbuido con estas raras propiedades elementales que solo pocos letrados en la magia comprenden, y al parecer, después de muchos intentos, y remodelaciones, creo a un golem, poco más alto que un humano normal, corpulento como un enano al cual pudo imbuir con magia concentrada en una gema elemental, que es como se les conoce hoy en día, así sus sintéticos fueron conocidos como semi-organicos, maquinas con gran poder mágico infundido en ellas, las cuales utilizo para tratar de deshacerse de la facción que los que son como el consideran enemiga, y así comenzó una batalla horrenda, grandes sabios caían gracias a las salvajes maquinas semi-organicas de Uznemir, y aunque varios guerreros eran capaces de hacerles frente, no fue hasta que un humilde servidor intervino en este ardid de sombras… 

No es presunción mía el decirlo, me costó mucho trabajo el descifrar como si quiera es que ese desquiciado logro condensar la magia de tal manera que pudo crear las gemas, ahora, es sabido que los grandes maestros de las artes arcanas son capaces de crear, con mucho esfuerzo y práctica, una gema altamente condensada con una presión determinada para cada elemento, sabiendo esto, fuimos capaces de atacar sus núcleos y así desestabilizar sus mecanismos lo suficiente como para detenerlos… 

De eso ya hace mucho tiempo, yo aún era un joven cuando logre tal proeza, la cual me gano la atención de mi actual amo, y muchos años después, cuando era ya un adulto y un sabio respetado, el vino por mí, para convertirme en su aprendiz, y durante el viaje, el me mostro un efecto inesperado del descubrimiento de Uznemir… Los golems que no pudieron ser removidos, varios de ellos fueron dejados como reliquias de tiempos de guerra, recordatorios de la destrucción que las especies de la tierra son capaces de ocasionar, pero estos eran muy diferentes, estos se movían por si mismos y estaban llenos de vida, por llamarlo de alguna manera… Ellos, así como me lo explico mi maestro, gracias a sus núcleos desestabilizados y a los años de estar en contacto con diferentes elementos y materiales, varios habían logrado absorber la vida de sus diferentes ambientes, sin llegar a dañarlos, logre ver golems de tierra y madera caminar por vastos bosques, navegar por extensos lagos y reconstruir montañas… 

Estos nuevos seres se trasformaron en golems orgánicos, con esqueletos mecánicos, aunque con inteligencia, vida propia y control sobre sí mismos, tratando de vivir por su cuenta. Quizá sean una gran amenaza n el futuro, eso ni mi maestro lo sabe, pero todo depende de los giros que den las grandes fuerzas de la tierra de ahora en adelante.

Edmund Lemman


jueves, 7 de mayo de 2015

Sobre los Kederer



-¿Qué sabes de la época de la gran sombra?- pregunto mi joven aprendiz. –Más que la gran mayoría del mundo- fueron mis palabras de respuesta-Cuando la gran obscuridad empezó a cubrir este mundo, muchas de las sombras que solo podían ser visibles gracias a la obstrucción de luz, fueron capases de tomar forma propia, y así consumir a muchos de los seres vivos que no podían oponerse a su voluntad… Y fue así como este mundo alojo a los Kederer, sombras con voluntad propia capaces de asimilar la vida y esencia de las criaturas de esta tierra, muchos viajeros se han enfrentado a ellos y sobrevivido con severas consecuencias.



Eso paso hace ya muchas lunas, antes de que yo me convirtiera en el aprendiz de una fuerza aun mayor, ahora sé que algunas vasijas de vida fueron lo suficientemente fuertes de espíritu como para poder asimilar a los kederer y son estos aún más peligrosos que las sombrías bestias de las selvas inexploradas, pues ellos son los conspiradores de la sombra la necesitan y la adoran más que cualquiera y están dispuestos a acabar con toda la vida que se oponga ante ellos y su objetivo, pero aun así, deben ser detenidos pues no es imposible y estoy seguro que mi maestro está dispuesto a apoyar a todos aquellos que se opongan a la sombra.



Edmund Lemman


domingo, 19 de abril de 2015

El comienzo del viaje.



Día 10 del onceavo ciclo nocturno, año 19 después de la noche eterna

Este día eclíptico resulto ser de bastante ayuda para mí, ya que fui contratado en el poblado costero de Rosamar para investigar cerca de una mina supuestamente abandonada después de muchos años, al enterarse el alcalde del pueblo que no soy completamente humano, sino un hijo de la luna, así que para ellos fue natural el pensarme un mercenario… tan falso como eso sea, el ganar unas monedas jamás me ha caído mal, por lo cual acepte su oferta y es así como esta noche me dirigiré hacia dicha mina, para así saber que es lo que pasa, y en el mejor de los casos, obtener un poco más de información sobre mi viaje, ya que a mi parecer, para vivir mejor dentro de este mundo de noche eterna, necesito entenderla mucho mejor.

Fue esta noche eterna y sus emisarios los cuales me separaron de mi única familia y estoy dispuesto a regresarles el favor en cuanto tenga los medios necesarios para lograrlo, por el momento, me dirigiré a la taberna local para beber un poco, y después de eso, a investigar esta mina.

Tomado del diario de viaje de Siff hijo de la luna
Viajero Lupino.